El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, reconoció en declaraciones al diario El País, de España, que tardó en medir la magnitud de la crisis, pero afirmó que no dudará en tomar nuevas medidas "impopulares" para enfrentarla.
El ejecutivo pasó "demasiado tiempo en el debate de si teníamos une crisis o une desaceleración", afirmó el jefe del gobierno socialista, muy criticado por la oposición por su falta de reacción inicial ante la crisis, que estalló a fines de 2008.
Zapatero anunció desde comienzos de 2010, ante la preocupación de los mercados financieros, una serie de medidas de reducción de los gastos del Estado, incluyendo una baja de los salarios de los empleados públicos, así como una reforma del mercado laboral rechazada por los sindicatos, y un aumento del IVA.
"Sé muy bien que las medidas que he adoptado son impopulares; voy a aplicar estas medidas (...) y que nadie dude de que si hay que adoptar nuevas medidas las adoptaré", agregó Zapatero.
España tiene una tasa de desempleo de aproximadamente 20%, récord en la zona euro, y un déficit público que llegó al 11,2% del PIB en 2009, y que quiere disminuir a 3% en 2013.
El país está saliendo con dificultades de la recesión en la cual había entrado en 2008, afectado fundamentalmente por el estallido de la burbuja inmobiliaria.
Por Ambito.com
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